CARACAS, Venezuela.- El dirigente opositor venezolano Leopoldo López, quien es acusado por el gobierno de promover los recientes hechos de violencia, se entregó hoy a las autoridades en medio de una multitudinaria concentración opositora que fue contenida por un cerco policial.
Medios locales reportan que luego de dirigirse a los manifestantes en la plaza Brión, en el este de la capital, López caminó hacia el cordón policial, fue esposado y sacado del lugar por agentes de la Guardia Nacional (policía militarizada).
Un cable de la agencia DPA indica que el dirigente fue trasladado del lugar en un vehículo militar blindado luego de que los manifestantes le abrieran paso y llevado al lugar de reclusión.
Antes de entregarse, López dio un discurso a sus partidarios reunidos en la Plaza en el que dijo que no tenía nada que esconder y que si su detención servía para que el pueblo despertara "vale la pena".
"Me entrego ante una justicia injusta, corrupta, que no juzga de acuerdo a la Constitución y las leyes. Me presento ante ustedes con un profundo compromiso de que si mi encarcelamiento sirve para que despierte el pueblo, lo asumo", dijo con un altavoz sobre un camión.